Casualmente esta semana coinciden tres hechos que, vistos sin profundizar demasiado, como mínimo invitan a pensar que vivimos unas cuantas décadas atrás. Me refiero a la celebración del Día de la Hispanidad, con su desfile militar y manifestaciones aledañas; al rechazo en el Congreso de los diputados de una propuesta para tipificar como delito la apología del franquismo (en Catalunya el PP evitó tener que votar una moción similar huyendo del hemiciclo, y casi simultáneamente en el Parlamento Europeo los populares se opusieron amargamente a la aprobación de una resolución de condena del franquismo); y a la macrobeatificación de más de 500 mártires católicos de la Guerra Civil que la Iglesia llevará a cabo mañana en Tarragona. Sólo faltaría que el Congreso declarara la tauromaquia patrimonio cultural… Ah, que ya… Seguir leyendo «España en blanco y negro reloaded»
Etiqueta: España
Me inquieta que no sean estúpidos
No pensaba escribir sobre el “conflicto” Catalunya-España. Ya lo ha hecho mucha gente desde todos los puntos de vista posibles. Yo también lo he hecho anteriormente en este mismo blog. De hecho, no hace mucho di mis razones para no bajarme del “barco España”, razones basadas única y exclusivamente en los lazos que mantengo con personas de todos los puntos del Estado y en el repelús que me producen las exaltaciones patrióticas de quienes se envuelven en la estelada. Seguir leyendo «Me inquieta que no sean estúpidos»
Seamos felices en la irrealidad de Matrix
Madrid aspira por enésima vez a convertirse en sede de unos Juegos Olímpicos. En unas horas sabremos si se los conceden. Hasta Buenos Aires se ha desplazado una delegación española compuesta por ciento y la madre (dudo mucho que cada uno de los desplazados se haya pagado el viaje y la estancia de su bolsillo, pero vamos, seguro que el dinero sale de algún patrocinador patriota) para asistir en directo al anuncio del Comité Olímpico Internacional. Estaría bien ver a la alcaldesa Ana Botella, doctorada en Filología inglesa como mínimo (la rueda de prensa del jueves fue la prueba fehaciente), igual que su marido el de las Azores o el rey de los percebes, también conocido como el presidente plasmado o, más cariñosamente, el señor de los chuches… Decía que estaría bien ver a la Bottle y su colla dar los saltos de alegría que protagonizó Pasqual Maragall hace como 27 años, cuando el señor aquel de pasado un tanto sospechoso que presidía el COI dijo aquello de “à la ville de Barsalona”. Seguir leyendo «Seamos felices en la irrealidad de Matrix»
Vivo en un país incuestionablemente democrático
Hoy estoy contento. No porque sea mi cumpleaños, que también, sino porque me he dado cuenta de que vivo en un país inmensamente democrático, donde la justicia funciona y la mayoría de la gente es honesta y digna. Y como esto es un hecho incuestionable, esta mañana al despertarme he llegado a la conclusión de que toda la mierda que nos ahoga día sí y día también va a ser limpiada a fondo antes de lo que creemos. Porque así son las cosas en los países incuestionablemente democráticos. Seguir leyendo «Vivo en un país incuestionablemente democrático»
Razones para no bajarme del barco España

Sabéis que en Catalunya existe un encendido debate sobre el derecho a decidir, que viene a ser el eufemismo que se utiliza para referirse a la convocatoria de un referéndum por la independencia. Estoy completamente a favor de que se permita dicho referéndum.
Una democracia es algo más que votar cada cuatro años a nuestros representantes políticos, dándoles vía libre para que se fundan los recursos públicos como mejor les apetezca. En una democracia la ciudadanía debería tener voz y voto para decidir sobre las cuestiones que le afectan directamente, y más cuando los gobernantes toman decisiones que en ningún momento plantearon en su programa electoral, pero esa es otra cuestión que ya he abordado en otros artículos (y que volveré a abordar, desde luego), y que se escapa del propósito de esta reflexión. Seguir leyendo «Razones para no bajarme del barco España»
Una crítica emocionante

Ayer recibí uno de los e-mails más deliciosos y emotivos que recuerdo. No, no era uno de esos powerpoints repletos de bellas imágenes y mensajes inspiradores, sino un mensaje personalizado, de los que hace ilusión leer. Una de las cosas más sorprendentemente positivas que estoy experimentando desde que soy activo en el mundo virtual es la cercanía, la familiaridad que se puede llegar a establecer con otras personas que hasta entonces habían sido completas desconocidas. Pues bien, el mail era de una de esas personas, una joven bloguera a la que descubrí recientemente.



