
Una de las primeras lecturas que recuerdo es Cuentos por teléfono, de Gianni Rodari. Era uno de los libros más populares de la biblioteca de la escuela, y creo que el motivo no era únicamente que el fantástico contador de historias italiano planteaba situaciones absurdas y, por tanto, divertidas, sino una razón más profunda de la que, probablemente, a aquella tierna edad no era consciente. Aquellos desternillantes cuentos breves explicaban de una forma muy amena historias a menudo trascendentes, de las que dejan poso. Eran ejemplo de buena literatura.
La oreja verde es uno de los cuentos de Gianni Rodari, que inspiró a Paco Abril, veterano cuentacuentos, turolense de nacimiento y asturiano de adopción, para crear el suplemento infantil del mismo título del diario La Nueva España, que apareció semanalmente durante veintitrés años, hasta 2012. Y me atrevo a decir que no es ese el único nexo de unión entre ambos magos de la palabra, pues los cuentos y poemas de Paco Abril contienen la misma esencia mágica de los de Rodari, esa que atrapa al escuchante y no lo suelta hasta revelarle el final.
Aunque Paco Abril es mucho más que un cuentacuentos (que ya es mucho), o quizás se podría decir que en su faceta de cuentacuentos integra todo aquello que surge de su hiperactiva imaginación. O mejor que hiperactiva, desbordante, pues hiperactividad no es un concepto que encaje demasiado bien con alguien que reivindica la lentitud como un valor necesario. Seguir leyendo «IV Congreso de Escritores: el mentir verdadero de los cuentos»