Conocí a Edwin hace apenas tres meses. Dejó un mensaje para felicitarme por el blog en la página ‘Quién soy’ y, como es normal, visité el suyo. Enseguida comprobé que este boricua orgulloso de su islita no es un tipo corriente. Leí varios de los relatos y microcuentos con los que nos obsequia a diario y descubrí que además de ser un creador de historias compulsivo, tiene talento para ello. Cada una supera a la anterior en capacidad para sorprender e impactar. En sólo unas pocas palabras consigue con facilidad inaudita trasladarte a su mundo y hacerte sentir las sensaciones de los personajes que apenas perfila, pero que inevitablemente cobran vida en la mente del pasmado lector.
Domina con maestría cualquier género en el que se aventura, pero especialmente el microrrelato. Imaginativo, incisivo, delicado, apasionado, cruel… Edwin es un malabarista de la palabra, siempre con un as en la manga que nos “destroza” en el último momento. Quienes lo seguís sabéis de lo que hablo, y los que no lo conocéis aún haced la prueba. Entrad en su blog y elegid tres o cuatro posts al azar.
Cuando anuncié que ‘El viaje de Pau’ ya estaba a la venta no dudó en adquirirlo vía Amazon, lo cual le agradezco de corazón, igual que al resto de lectores. Pero le agradezco aún más su apoyo incondicional y los sabios consejos con los que me ha obsequiado y me sigue obsequiando. El aliento de la gente es el mejor combustible posible para avanzar con un proyecto y confiar en su viabilidad, y Edwin, más que aliento, me regala bocanadas de viento huracanado.
Acabó mi novela en menos de un día y sé que los magníficos halagos que le dedicó fueron sinceros, porque no es persona amiga de la mentira ni de la hipocresía. Tampoco va con él el regalar palabras amables para quedar bien. Ha vivido mucho, experiencias terribles incluidas, como para dedicarse a estas alturas a dorarle la píldora a nadie.
¿Y cómo puedo estar tan seguro de lo que digo? Pues porque he leído ‘Mi peor enemigo soy yo’, la novela en la que ha invertido un buen puñado de años y que recoge, más o menos disfrazada, buena parte de su experiencia vital. Digo disfrazada porque no es una autobiografía, sino una ficción biográfica basada en su propia vida.
‘Mi peor enemigo soy yo’ ya está a la venta en Amazon, pero cuando yo le pregunté a Edwin cómo podía adquirirla lo que hizo fue enviármela a Caldes de Montbui con dedicatoria incluida. Otro detalle que revela de qué pasta está hecho este maestro, no sólo de profesión.
No es una novela al uso. Es un libro difícil, repleto de reflexiones, de sueños, de recuerdos, de alusiones a referentes literarios, artísticos y mitológicos. Pero está escrito desde la verdad y la pasión. Cada una de las palabras que lo componen llevan la firma de Edwin Colón, transmutado en Alberto Salcedo, mayor que él y con una existencia presente mucho menos plácida que la suya (me consta que la familia es el mayor tesoro del autor).
El protagonista hace balance de su vida en un momento en el que debe decidir cómo vivir lo que le resta de ella. ¿Atormentarse por los errores cometidos o asumir las consecuencias para poder iniciar un nuevo camino desde la honestidad?
Los recuerdos se encadenan y se mezclan los sentimientos. La nostalgia, la alegría, el orgullo, la tristeza, el miedo, la esperanza… Y así, avanzando por este laberinto de ideas y sensaciones, vamos conociendo a Alberto… y a Edwin, identificándonos con él, lamentando algunas de sus decisiones, aplaudiendo otras… Comprendiendo, en definitiva, que asistimos a la aventura vital de una persona como nosotros, que ha sufrido y que ha disfrutado; que se ha equivocado, pero también ha acertado; y que, en cualquier caso, merece nuestro respeto y empatía, porque, por encima de todo, se trata de una persona que quiere avanzar por la senda de la dignidad.
Gracias, maestro.
Amigo, pocas veces me quedo sin palabras y está ha sido una de esas que las lágrimas han cobrado voz y me han dejado completamente mudo. Simplemente gracias Benjamín por este hermoso regalo sorpresa. Un fuerte abrazo!
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Puedes estar seguro que si el libro no valiera la pena no le habría dedicado este post escrito con el corazón. Es lo mínimo que podía hacer. Un abrazo, maestro!
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¡A mi me gustaría tener los libros de ambos en mi biblioteca de Argentina! ¿Cómo podemos hacer?
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Quizás haciendo un pack en Amazon te ahorres los gastos de envío… Me encantaría poder vender mi novela en Argentina, ya te lo dije. Tendré que estudiar la viabilidad de imprimirla allí mismo. Un abrazo!
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WOW! Palabras hermosas. Me siento tan orgullosa de mi papá. ¡Gracias Benjamín!
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Yo también estaría orgulloso, es un gran hombre (y que conste que estoy muy orgulloso del mío, jeje…). Un abrazo!
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Gracias a ambos, un abrazote a los dos!
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Las palabras sinceras de Benjamin Recacha, engrandecen hasta al hombre mas pequeño. Yo tambien leí la extrahordinaria novela que Edwin dedicó por años. Reelerla, cambia la visión de mundo que poseemos en nuestros subconsientes, o al menos en mi caso. Como bien menciona Benjamin, cada oración creada por uno de los herederos de Sofócles y William Shakespeare (Edwin), es un regalo que a diario no cesa de dar; y lo precioso de todo, es que lo hace sin esparar nada a cambio. Gracias Benjamin, Gracias Edwin.
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Su novela es un ejercicio admirable de honestidad. No es fácil escribir un libro así, desde luego que no, y tiene la virtud de lograr que el lector se identifique plenamente con los avatares de la vida del protagonista, porque, como digo, es la vida de un hombre único, pero también común, una persona como tantas que buscan la felicidad. Gracias a ti por pasarte por aquí. Un abrazo!
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Gracias a ambos por sus reflexiones!!!
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Reblogueó esto en edwincolonpagany comentado:
Para los amigos de mi blog que no han tenido acceso al emotivo artículo que escribió el periodista y escritor español Benjamín Recacha sobre mí novela ‘Mi peor enemigo soy yo’ y sobre mi blog. Mis más expresivas gracias al amigo Recacha, que lo disfruten…
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Conozco a Edwin profundamente. Se el gran ser humano que es y la maravillosa inteligencia con la que Dios le bendijo. Si e algo me siento orgullosa es de haber compartido años de trabajo con el en la Oficina para el Desarrollo Humano, Oficina del Gobernador en nuestro amado Puerto Rico. Alli no solo compartíamos el trabajo, si no también el gusto por la pintura, la buena música, poesía, unicornios y sueños de un mejor futuro. Juntos tejíamos sueños para su hijo Leo recién nacido y para los niños de nuestro amado país. Como planificador siempre planifico para un mejor Puerto Rico. No compartimos amenudo, pero Edwin sabe que le recuerdo con profundo cariño asi como a Roxana su compañera de sueños, amores y vida. Dios te bendiga Edwin.
TQM.
Viden
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Hermosas palabras, Viden. Que después de tanto tiempo mantengas ese magnífico concepto sobre Edwin me hace ratificar en mis palabras. Y no me sorprende en absoluto lo que comentas. De hecho, juraría tenerte localizada en uno de los personajes de la novela. Muchas gracias por pasarte por aquí y dejar ese precioso comentario. Saludos.
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Pues es muy buena recomendación. Ahora se me acumulan los libros para comprar: el tuyo y el de él.
Añado que tengo un familiar (político, pero no por ello menos familiar) que se llama Alberto Salcedo. Creo que además resultará ser un buen regalo para estas navidades.
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Las casualidades no existen, Fátima… jajaja. Será un honor que leas mi libro. Desde luego, te recomiendo el de Edwin. Un abrazo!
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Estou segura de que es un libro excelente, como lo es su autor.Gracias por la recomendación Benjamín. Abrazos.
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Es un libro que sólo podría haber escrito Edwin. No se parece a nada que haya leído anteriormente y, por supuesto, está escrito de forma impecable. Muy recomendable. Un abrazo!
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