Llevo unos días bastante desconectado de la actualidad. Me he enterado de que se continúan destapando evidencias sobre los cobros de sueldos en negro de todo “quisqui” en el PP; que Sorayita dijo el otro día que ha llegado el momento de que los políticos también se sacrifiquen (con el colchón que han acumulado en su partido les será menos sacrificado); que Wert sigue haciendo méritos para figurar en los anales de los ministros más infames (ahora resulta que si no llegas al 6,5 deberías cambiar de estudios… Pues parece que su compañero presidente del gobierno y Súper Josemari pertenecen al club de los zoquetes… nada sorprendente, por otra parte).
También he oído que la selección le metió un 10-0 a Tahití (sí, también allí juegan a fútbol) en una competición que se disputa como aperitivo del Mundial del año que viene, en el mismo escenario donde millones de personas que continúan siendo tan pobres como siempre, a pesar del milagro brasileño, por fin han dicho basta y reclaman menos mundiales y menos Juegos Olímpicos y más dignidad; que algo parecido sucede en Turquía, donde buena parte de la población se ha rebelado contra el discurso único y los delirios de grandeza de su presidente, quien –qué raro– se ha apresurado a acusar a los contestatarios de terroristas (¿de qué me suena?); que en Catalunya continuamos monopolizados por el debate soberanista, mientras el gobierno neoliberal de CiU sigue con la tijera a todo trapo (pobrecitos, les obligan a hacerlo, pero ellos no quieren) y se multiplican las evidencias de saqueo a los recursos públicos, acusaciones que, por supuesto, son orquestadas contra los honestísimos políticos nacionalistas por parte de quienes pretenden dinamitar las aspiraciones soberanistas del poble català (próximamente escribiré un artículo sobre la cuestión independentista).
De los (no) pisos (no) vendidos por la Infanta no sé nada. La Agencia Tributaria tampoco parecía saberlo, hasta que esta tarde ha dejado por fin las cosas muy claras (¿sí, seguro?). Todo ha sido un lamentable error… Y tampoco sé nada del banquero bueno al que un juez malvado envió injustamente a la cárcel. Por suerte, la injusticia ya ha sido solventada.
Lo más importante, de todas formas, es que estamos saliendo de la crisis. El mejor ejemplo es la inminente fusión entre PP y PSOE. El principal partido de la ¿oposición? se ha dado cuenta de que lo que este país necesita es un gobierno fuerte, sin fisuras, que acometa sin titubeos la labor de ¿mejorar las condiciones de vida de las personas? ¿Reducir el paro? ¿Mejorar los servicios públicos? ¿Apostar por un modelo productivo basado en el conocimiento? Ay, cuánto soñador con pájaros en la cabeza. Lo importante, lo que España requiere, es más sacrificios para lograr esa meta ansiada, esa recompensa al final del camino llamada objetivo de déficit. Juntos podemos lograrlo. Como hemos logrado ya que fluya el crédito… A qué vienen esas caras desencajadas y esos improperios… Pero si me he limitado a reproducir la realidad. Es lo que dice el gobierno a través de sus medios amigos y de la publicidad. ¿O es que no habéis visto/escuchado el anuncio del FROB? Sí, ése, el del grifo.
Este mediodía he tenido la inmensa fortuna de escuchar la nueva versión, en la que se arrojan incuestionables datos sobre las cataratas de dinero que, gracias al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria, está cayendo sobre la economía real. Por fin pequeñas y medianas empresas y autónomos disfrutan de un entorno ideal para generar riqueza. Gracias al FROB, y al gobierno del PP, por supuesto.
Si es que nos quejamos de vicio.
Bueno, ahí os dejo, que tengo una novela que promocionar. Sí, ésa, la de la foto de la cabecera.
la recacha 
Benjamín, cada día me gusta más tu blog! En este post lo bordas! Felicidades amigo virutal!! 😉
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Ja, ja! Me encanta lo de ‘virutal’. Muchas gracias, mi fiel cangreja. Reconozco que llevo unos días alejado de la comunidad bloguera que tanto aprecio, pero es que estoy liadísimo con el libro y la página nueva de facebook que he abierto. En unos días me pongo a tope otra vez y me tienes en tu rincón dando la brasa como siempre. 😉
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La salida de la crisis está más cerca de lo que se puede imaginar. Los propios trabajadores de El Corte Inglés prefieren el paro a las condiciones que les impone tan samaritana empresa. El día que no haya nadie trabajando, el día que los sueldos no excedan el pan y el agua, ese día se creará trabajo para todo el mundo. Y no está lejos. Mientras tanto, el gobierno trabaja a destajo para acelerar su llegada.
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Cuánta razón tienes. Me repatea el estómago escuchar a tertulianos y políticos hablar de la desaceleración del ritmo de destrucción de empleo como un indicador de que las cosas van mejor. ¡Pero cómo no se va a reducir el ritmo de destrucción de empleo, si cada vez queda menos gente trabajando! Y lo peor es que cuando ocurra lo que aventuras (que ocurrirá), entonces todo el mundo dará palmas con las orejas por los muchos puestos de trabajo (en condiciones de semiesclavitud, pero es igual) que el gobierno del PP estará creando.
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Buenísimo articulo. Felicidades Benjamín, por deleitarnos como siempre con tu personal estilo y humor. Yo también he estado alejada de las noticias y gracias a esta lectura, me he puesto al día. La hipocresía de estos tipos del gobierno no conoce límites. Y como dices, lo más sangrante es la justificación del «no hay más remedio» que un amplio sector de los ciudadanos, se cree a pies juntillas. Por algo en este país se ve tanta tele y por algo los medios de comunicación son el escaparate a medida de los que gobiernan. Una manipulación absoluta para controlar a los votantes. Me pregunto como sería la realidad si hubiese una información plural. Si profesionales como tu mismo, ejercieseis vuestra noble profesión de informar, desde algún medio con gran difusión. Si se animara a los ciudadanos a ejercer el sentido crítico, la responsabilidad y el civismo. A lo mejor cambiaban algunas cosas…
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Gracias, Yolanda. Hay mucha gente que ejerce el sentido crítico (aquí nos juntamos unos cuantos), pero no parece que aún sea la suficiente como para cambiar las cosas. Es una tarea ardua y que da resultados en pequeñas dosis. No podemos obviar que las raíces del tinglado montado llegan muy hondo y tienen incontables ramificaciones, así que desmontarlo para construir algo nuevo, socialmente mucho más justo, requiere un esfuerzo enorme. El primer paso es conseguir que cada vez más gente abra los ojos a la realidad. Un abrazo!
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Me encanta tu post, porque es la pura realidad. Me pregunto: ¿Dónde está el pueblo? Hace unos días acudí a una manifestación, dónde se manifestaban en contra de las cláusulas suelo, las preferentes..Era lamentable ver, que sólo éramos un grupo de unas 30 personas. En esta ocasión iba en apoyo, pues gracias a Dios, no estoy afectada por esto.
Entre todos, si nos uniésemos, conseguiríamos muchas cosas, pero claro, entre todos.
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A la mayoría de la gente le cuesta moverse si los problemas no les afectan directamente. La crisis nos afecta a todos, pero mientras mantengamos el empleo, podamos pagar la hipoteca y tengamos para comprar comida pues parece que es cosa de otros. A ver si conseguimos cambiar esa mentalidad, demasiado egoísta y conservadora. Gracias y un abrazo!
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